Recientemente ha aparecido un movimiento que se conoce como "Muerte Positiva", creado por la Orden de la Buena Muerte (una organización creada en 2011 en Estados Unidos), que proclama que la muerte es parte de nuestra vida y que debemos comprometernos a enfrentarnos a nuestros miedos, ya estén causados por la muerte de seres queridos, nuestra propia muerte, la vida después de la muerte, el dolor, los cadáveres, la descomposición del cuerpo o todo lo mencionado; aceptando que la muerte es un proceso natural, pero que la ansiedad y el terror que nos impone la cultura moderna no lo es.  

 

Incorporando el concepto de "muerte positiva" a nuestras vidas, rompemos también con el peor de los tabús. Hablar de la muerte no ha de ser algo mórbido ni pesimista, muy al contrario, propiciar conversaciones y hacernos preguntas en torno a este tema puede ayudarnos  a procesarlo mejor y a entender lo que sentimos.

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Somos mortales y podemos morir en cualquier momento. Empecemos por aceptarlo como algo natural en lugar de negárnoslo.